¡¡¡IÑIGO PUBLICA SU PRIMERA FOTO!!! y viaje a Pushkar a la Feria del Camello

Lo primero y más importante de todo... ¡¡¡Iñigo ha publicado su primera foto!!!. Para todos los que no la hayáis visto ya, os dejo el enlace:

http://www.kbnt.com/49100-Turistas-y-comerciantes-invaden-la-localidad-india-de-Pushkar-con-motivo-de-la-feria-del-camello.html

Si pincháis encima de la foto, ésta se hace grande y al final del texto aparece su nombre. ¡¡¡Qué ilusión!!! Ahora que es un fotógrafo mundialmente famoso tendrá menos tiempo para escribir en el blog pero no os preocupéis que yo le presionaré y no le dejaré olvidar sus raices...

Además de eso (y siempre en segundo plano), ayer volvi de Pushkar, de la Feria del camello más grande de Asia. Iñigo se queda hasta el viernes para seguir haciendo fotos hasta el final de la Feria.

Nos recogió la furgoneta en la Oficina el viernes por la tarde y nos enfrentamos a un viaje que prometía ser más corto que el de Jaisalmer pero que al final se hizo eterno por las múltiples paradas y la incomodidad del coche. En nuestra furgoneta ibamos Paco, Pelayo, Guiomar, Bibiana y yo (coche de la Oficina Comercial), y en la furgoneta de al lado iban Gisela, Cristóbal, Marc y dos de visados (coche de la Embajada). El chófer era muy simpático y nos dejaba poner la música que quisiéramos así que Paco puso su disco de Chill Out para que nos durmiéramos sin caer en la cuenta de que el chófer se estaba durmiendo también, por lo que las paradas a que el conductor se tomara un té fueron múltiples.

A las dos de la mañana llegamos por fin a Pushkar y todavía nos dio tiempo a perdernos un poco por el pueblo, con todo el personal del hotel buscándonos por las calles. Al final conseguimos llegar al White House Hotel, que como su nombre indica, es muy blanco y muy limpio.

A la mañana siguiente desayunamos todos juntos mientras Iñigo nos explicaba los secretos de Pushkar (él llevaba ahí ya 4 días), y nos hizo de guía hasta que el grupo se dispersó y yo me fui con el súper guía al desierto a ver los animales.

Y digo animales porque no sólo había camellos, también había muchos caballos, vacas, bueyes y alguna cabra. El desierto era muy bonito, con todos los camelleros (de la casta de los Guerreros del Desierto, que los hace parecer aún más guays), sentados con los camellos y haciendo transacciones. Tiendas de campaña con comida y artesanos haciendo saldalias de cuero, monturas para los camellos... ¡¡Incluso un pequeño parque de atracciones!! Con una noria que giraba rapidísimo, de verdad, ilegalmente rápido.

Os dejo un video de la zona de los caballos, con unos árabes preciosos y muchos potros. (Hoy youtube no quiere funcionar así que os adjunto los videos aquí mismo).



También os dejo una foto mía en la carpa veterinaria de la Feria.

Ahora os adjunto un video de la zona de los camellos, que era mucho más grande que la de los caballos.

Además de la Feria del Camello, eran días santos por lo que la ciudad estaba llena de peregrinos y de sadhus, que son unos monjes que en un momento dado dejan su vida, su profesión y su familia y se dedican a peregrinar por la India meditando. Viven en cuevas, bosques, o en las calles de las ciudades y sobreviven gracias a la limosna. Van casi desnudos, con una tela como la de Ghandi en las piernas, el pelo largo, barba y un cuenco en la mano para comer. En Pushkar hay uno de los pocos templos dedicados a Brahma, por lo que es una ciudad muy concurrida. Os dejo el video para que veáis la entrada al templo que estaba en la calle principal del mercado.




Pues eso, que como eran días sagrados, en Pushkar no había ningún tipo de carne, ni huevos, ni alcohol... NADA. Nos fuimos a comer a la terraza de un hotel con unas vistas preciosas del lago de Pushkar, que se considera sagrado, y donde los indios se bañan desde los ghats, que son las escaleras que bajan al lago. Por la tarde me fui con Iñigo de compras por el mercado de Pushkar, que es muy grande y tiene unas tiendas muy chulas y sobre todo, muy baratas. Arrasamos con bolsos, vestidos, camisas... Vimos el atardecer desde un ghat en el que no había nadie (milagro). Os dejo un video de Pushkar desde el ghat.




A la vuelta al hotel vimos muchísimos monos enormes de estos que tienen el culo pelado. Hay que tener mucho cuidado con los monos porque se tiran de los tejado de las casas a la calle y se te puede caer uno encima (de hecho, ¡vimos cómo tiraba a una señora al suelo!). No me gustaron los monos. Por la tarde también llegaron Elena y su padre, que ha venido a visitarla 20 días.

Por la noche cenamos en el hotel y agotados, nos fuimos todos a dormir. A la mañana siguiente, nos fuimos Iñigo y yo a pasear por las calles de Pushkar, rodeamos el lago y volvimos al desierto a que me despidiera de los camellos. Comimos todos juntos en un restaurante con vistas al lago y nos fuimos al hotel a hacer la maleta y a volver a la furgonta-de-los-horrores. Elena se vino con nosotros en la furgo, para no faltar al trabajo hoy, por lo que el espacio era aún más limitado, que si lo juntamos con las 2 horas de atasco a la entrada de Delhi, se convirtió en uno de los peores viajes que he hecho en mi vida (10 horas para 350 km). Gracias a Dios, el conductor nos volvió a dejar poner nuestra música (a pesar del Chill Out de la ida) y estuvimos cantando para hacer el viaje más corto. No sé que prefería el conductor, si el Chill Out o 6 voces intentando entonar canciones de Shakira. Por ser tan simpático y paciente, le dimos una buena propina.

Iñigo se ha quedado con el padre de Elena, que se vuelve hoy a Delhi, y esta mañana se han ido a Ajmer, que es una ciudad que está como a media hora de Pushkar desde la que Vicente (el padre de Elena) se coge el tren esta tarde.

Una vez más, ha sido un viaje precioso. Pushkar es una ciudad muy bonita y muy mágica, y las fechas en las que fuimos lo hicieron aún más especial. Estamos todos con mucha pereza de haber vuelto a Delhi y planeando ya el siguiente viaje.

Mañana es el cumpleaños de Guiomar y lo celebramos por todo lo alto con una cena mañana y una fiesta el jueves. Iñigo vuelve el viernes así que este fin de semana aprovecharemos para seguir conociendo Delhi, hacer más videos para poder colgarlos en el blog, y empezar a ponernos nerviosos con la inminente llegada de MAMÁ, PALOMA Y MARÍA. ¡¡¡¡¡Yuuuuuuujuuuuuuu!!!!!. Estamos muy muy contentos y con muchas ganas de abrazar a las 3. Nos encanta que venga gente así que ya sabéis, tooooodo el mundo tiene que venir a vernos.

Mientras tanto, seguir dejando comentarios por favor. Nos encanta saber que nos seguís tanto y nos hace mucha ilusión leeros. Un besazo enorme.